¿TE GUSTARÍA CONVERTIRTE EN UNA PERSONA MEJOR?
LO SIENTO... ESTE NO ES EL SITIO.

Te doy la bienvenida al inicio de mi rinconcito; a partir de ahora nuestro.

Este lugar ha sido creado para que puedas conocerte mejor, entender por qué has llegado a este punto y aprender nuevas formas de vivir sin que la vida te pase por encima.

¿LA TERAPIA? DESEMPOLVAR 

SOLTAR [O NO].

Y SEGUIR.

A veces se nos acumula el trabajo y el trastero de casa está tan lleno que ni tú sabes qué hay dentro. Un cajón con cosas que ya ni recordabas, otro con cosas desgastadas de tanto usarlas, otro con cosas que solo estorban…

¿Y tú qué haces? 

Pensar que en algún momento hay que ordenarlo.

SPOILER: ese día nunca llega.

Empezar terapia es algo parecido. 

Es saber que tienes que abrir ese trastero, pero no saber ni cuándo, ni cómo, ni con quién. Pero una vez empiezas, es ir abriendo la puerta de ese cuarto, sin prisa ni miedo (o igual sí, no te miento), y empezar.

Empezar a hacer inventario de lo que te quieres quedar, de lo que tirar; incluso pensar en qué hacer con lo que otras personas dejaron en

 TU trastero sin tu permiso

No se trata de ordenar perfecto ni tirar todo, sino de crear un espacio donde puedas moverte sin tropezar con lo que hay tirado por medio.

Y tranqui, no lo harás sola ni solo.

Yo también estoy limpiando mi trastero, encontrando sorpresas buenas y no tan buenas. 

Y, ¿sabes qué? Que me he dado cuenta de que no pasa nada por no tenerlo todo limpio y ordenadito.

Así que, aquí te ofrezco un lugar para abrir la puerta de

tu trastero sin que todo lo que hay dentro te aplaste.

CONÓCEME

Bea Carranza

Soy psicóloga general sanitaria, extremeña y por qué no decirlo, bastante divertida y resolutiva. Siempre he sido la amiga, hija, hermana, etc. que escucha, resuelve y hace las gracias.

Así que he hecho de mi personalidad mi forma de trabajar.

 

Estudié la carrera en la Universidad Pontifica de Salamanca y me gradué del máster en la Universidad de Córdoba. He ido dando tumbos por algunas ciudades y durante ese tiempo me he dado cuenta que la vida es complicada, pero

no tienes por qué vivirla solx

y sin alguien que te acompañe.

 

Por eso te animo a que, si lo necesitas, hagamos juntxs ese recorrido o parte de él, despotricando, riendo, llorando, o como sea. En definitiva viviendo, pero de una manera que sea justa y respetuosa para ti.